Alex es un niño de 4 años descrito por sus padres como «difícil»: incluso cuando era bebé, era difícil hacerlo dormir. Actualmente duerme con sus padres. Dicen que el destete fue un desastre, porque Alex se negó a probar nuevos alimentos y texturas, dando preferencia a la leche materna. Ahora es un niño muy selectivo en la alimentación. Siempre ha tenido episodios frecuentes de ira y ante la frustración llora desconsoladamente.
Recientemente Alex se convirtió en hermano mayor. Nació su hermanita (Carolina), a quien él esperó con ansias durante todo el embarazo de su madre. Cinco meses después de la llegada de Carolina, los padres han consultado a un especialista, porque el ambiente en la casa, según ellos, se ha vuelto ¡insoportable! A cada solicitud de sus padres, Alex responde con un «no» rotundo, corre por la casa, lo desordena todo, rompe los juguetes de su hermana pequeña, responde con tono enojado a cualquier pregunta que se le haga. Ha vuelto a morder a sus padres y a ensuciarse la ropa interior con orina y caca.
Los padres se muestran agotados por sus comportamientos y reacciones emocionales. Le informan al especialista que lo están castigando constantemente: quitándole juguetes, gritándole, refunfuñando, apartandólo cuando pierde el control de sus emociones y comportamientos… pero nada parece estar funcionando y por eso piden ayuda.
¿Por qué se refiere a Alex como un niño «difícil»?
1. Es evidente que hay una dificultad en lasintonía entre Alex y sus padres en estos momentos. ¿Puede detectar las señales de tal dificultad?
2. Como adulto, ¿cómo podría fomentar la sintonía entre usted y Alex, si, mientras cuida a Carolina, Alex coge uno de sus juguetes y lo rompe justo delante de usted?
Pregunta 1: Es evidente que hay una dificultad en la sintonía entre Alex y sus padres en estos momentos. ¿Puede captar las señales de tal dificultad? | 1A. Enfados y lloros de Alex. | 1B. Enfados y lloros de Alex, así como los castigos constantes de sus padres. |
Pregunta 2: Como adulto, ¿cómo podría fomentar la sintonía entre usted y Alex, si, mientras cuida a Carolina, Alex coge uno de sus juguetes y lo rompe justo delante de usted? | 2A. Castigando a Alex de manera clara y regular por sus comportamientos malos. | 2B. Escuchando a Alex y dejándole pasar un rato agradable con Carolina. |
Objetivos: Experimentar la «presión» que se vive en un grupo. Estimular el pensamiento individual frente al pensamiento colectivo.
Método de implementación: Pedir a los niños que imaginen algunas situaciones en las que podría ser difícil rechazar una propuesta «equivocada». Utilizar la técnica de juego de roles para representar la situación elegida entre las propuestas. Tratar de encaminar la obra a un episodio que tenga que ver con la transgresión (por ejemplo, «Tus amigos te proponen fumar un cigarro. Trata de rechazarlo»).
Al final del ejercicio propulsar una reflexión en grupo, involucrando tanto a los actores como a los observadores de la escena.
Elementos a resaltar: ¿Cómo se siente diciendo no? ¿Es difícil? ¿Por qué? ¿Cómo reaccionaron los demás? ¿Cuál fue la consecuencia de ese rechazo?
Objetivos: Reconocer las «mentalidades» asociadas a determinados grupos sociales. Concienciar sobre el hecho de que los prejuicios y estereotipos son categorías rígidas, que no logran captar la riqueza de la realidad y no tienen en cuenta las diferencias individuales.
Materiales necesarios: cartel y rotuladores.
Método de implementación: En un cartel identificar una lista de grupos sociales (por ejemplo, maestros, médicos, sacerdotes, padres, drogadictos, ladrones…). Para empezar, los niños dicen (lluvia de ideas) todas las palabras que asocian con las diversas categorías (una a la vez) de manera espontánea, sin pensar mucho en ello. Después sigue una discusión en grupo en la que se desenmascaran los prejuicios e ideas fijas asociadas a los distintos grupos. En este momento, el póster se puede revisar y complementar con nuevas palabras que se desvíen de los patrones sugeridos (p. ej., «¿Todos los padres son…?» «¿Qué otras características pueden tener?» «¿Conocéis a algún padre que no sea…?» «¿Cómo son entonces?»).
Elementos a destacar: Las reflexiones estimuladas por el juego conciernan la rigidez de ciertas ideas u opiniones, los riesgos inherentes a este etiquetado, la importancia de poder mirar más allá de las categorías y ver a las personas en su individualidad y singularidad, así como la capacidad y el deseo de aceptar a los demás.