Como profesional, puede haber ocasiones en las que tengas que plantear a los padres tu preocupación por el comportamiento, el bienestar o el desarrollo de un niño.
Un enfoque de resolución de problemas te ayudará a ti y a los padres a trabajar juntos para abordar las preocupaciones. Este enfoque implica:
Una de las claves de este enfoque es hablar de las preocupaciones cuando surgen. Los problemas no suelen desaparecer por sí solos. Y si dejas que los problemas se acumulen, pueden ser cada vez más difíciles de abordar.
He aquí algunos consejos para poner en práctica este enfoque: