Tema 3 Depresión

3.1. Definición y síntomas: de lo normal a lo patológico

Los síntomas de la depresión (como muchos trastornos mentales) son normales. La mayoría de nosotros nos sentimos tristes, melancólicos, infelices, abatidos o decaídos a veces durante períodos cortos de tiempo. Sin embargo, estos síntomas pueden convertirse en patológicos si la intensidad es alta y si duran mucho tiempo, causando interferencias en la vida de la persona.

La depresión (según el DSM-5) se produce cuando la persona tiene 5 o más de los siguientes síntomas durante al menos 2 semanas seguidas:

  • Estado de ánimo deprimido durante la mayor parte del día
  • Disminución significativa del interés y el disfrute de todas las actividades
  • Pérdida o aumento de peso
  • Insomnio o hipersomnia
  • Agitación o retraso psicomotor
  • Fatiga o pérdida de energía
  • Sentimientos de inutilidad o de culpa excesiva
  • Disminución de la capacidad de pensar o concentrarse, o de tomar decisiones

3.2. Pensamientos Automáticos Negativos (PAN)

  • Los PAN son cadenas de pensamientos de autodesprecio que aparecen en paralelo al pensamiento normal, es decir, son pensamientos involuntarios y concretos que aparecen al mismo tiempo que el pensamiento. Estos pensamientos atraen la atención del individuo (y le distraen), y su aparición provoca un aumento del malestar emocional.
  • Tales pensamientos son característicos de la depresión: cuanto más grave sea la depresión, más a menudo y más atención consciente captarán estos pensamientos automáticos negativos (aunque el individuo también será más consciente de ellos).
  • Ejemplos de PAN: “No seré capaz de impartir la clase adecuadamente”, “No soy un buen profesor”, “No les gusto a los alumnos”, “Mis colegas piensan que no soy valioso ni inteligente”. Si estos pensamientos no se cuestionan y se creen en cuanto aparecen, puede ser un indicador de un problema.

1.4. Señales tempranas y de alerta para buscar ayuda

Si notas que últimamente estás sintiendo con más frecuencia e intensidad los siguientes síntomas:

Tristeza patológica, pérdida de interés y capacidad de disfrute y una disminución de la vitalidad que limita el nivel de actividad y produce un cansancio exagerado, que aparece incluso después de realizar pequeños esfuerzos.

Los sentimientos de culpa o inadecuación, la irritabilidad, el pesimismo sobre el futuro, los pensamientos de muerte o suicidio, la pérdida de confianza en uno mismo o en los demás, el deterioro de la concentración y la memoria, la inquietud, los trastornos del sueño y la disminución del apetito y la libido también actúan como predictores de la depresión.

Entonces, utiliza alguna estrategia para afrontarlo o ponte en contacto con un profesional de la salud mental (psicólogo y/o psiquiatra) para encontrar una solución lo antes posible. La salud mental es tan importante como la física.